¿Te cuesta expresar lo que sientes o piensas en tus relaciones? No estás solo/a. Comunicar de forma clara y sincera puede resultar difícil, especialmente cuando hay emociones incómodas de por medio. En Antes Tú Psicología, te contamos por qué a veces nos bloqueamos al comunicarnos, qué miedos se esconden detrás de este obstáculo y cómo puedes empezar a mejorar tu forma de comunicarte con herramientas prácticas y realistas.
¿Cómo puedo mejorar la manera de comunicarme?
Todas las personas que han estado en relaciones de pareja, que llevan tiempo con ciertas amistades, que han convivido con familiares, etc. sabemos perfectamente la importancia de la comunicación. Lo que ocurre, es que nos da miedo comunicarnos o nos cuesta y por esto, preferimos “dejarlo correr” y no decir nada. Con el tiempo, estamos tan cansados de aguantar que terminamos explotando ¿Te suena de algo?
POR QUÉ ME CUESTA COMUNICARME
Hay muchos motivos por los que puede costarnos comunicar, pero el principal tiene que ver con la relación que establecemos con las sensaciones desagradables. Es decir, para poder comunicarme, tengo que poder afrontar sensaciones incómodas, por ejemplo de vergüenza, de enfado, de tristeza, nervioso, etc.
POR QUÉ TENGO MIEDO A COMUNICARME
También existe la posibilidad de que me cueste comunicarme en concreto por una emoción muy recurrente en los seres humanos: el miedo. Cuando tenemos que comunicarnos nos pueden surgir muchos miedos: miedo a qué pensará de mí, miedo a herirle, miedo a que me rechace y se rompa nuestra relación, miedo a que me malinterprete… etc. Pero en resumen, todos los miedos que acabamos de mencionar tienen uno en común, el más profundo y natural en el ser humano: miedo a no ser aceptados, a quedarnos solos.
¿Y AHORA QUÉ HAGO, NO ME PODRÉ COMUNICAR NUNCA?
No, por suerte las personas tenemos capacidad de sobra para comunicarnos a pesar de todo. El problema viene cuando pensamos qué sólo lo podremos hacer cuándo no tengamos esos miedos o no nos sintamos con sensaciones difíciles como las que mencionábamos antes. Precisamente, esta es la excusa perfecta para no hacerlo nunca, ya que, “como siempre me siento así, pues todavía no estoy preparado”.
3 TIPS SOBRE CÓMO COMUNICARSE
Si has llegado hasta aquí, queremos resaltar la importancia de entender, por tanto, que cuando nos comuniquemos, especialmente las primeras veces, habrá muchas sensaciones encontradas y entre ellas, podrá seguir habiendo sensaciones desagradables y miedos. Es normal. Por eso, los pasos fundamentales para comunicarnos son:
- Ser conscientes de lo que sentimos y regularnos (la famosa regulación emocional siempre al rescate).
- Planificación básica: buscar de qué manera me sentiría cómodo/a expresando lo que quiero decir, dónde están mis límites, a qué quiero dar énfasis, en qué momento quiero hablarlo, etc.
- Lánzate. Cuánto más lo hagas, más seguridad tendrás y más veces lo lograrás. No lo dejes para dentro de un rato, para dentro de unos días, cuánto más acumulamos, el proceso de comunicarnos se vuelve más complejo e intimidante.
Incluso cuando las comunicaciones “no van bien” (esto lo expresan muchas personas en terapia si el otro no se lo ha tomado a bien) habrá sido un gran paso. Porque nuestro objetivo de comunicar no suele tener de base que la otra persona se lo tome todo a bien o lo comprenda perfectamente. La principal función de la comunicación es con uno mismo/a: soy capaz de pedir, soy capaz de protegerme, soy capaz de darle importancia a mis opiniones o pensamientos, soy capaz … DE COMUNICARME.